Esta es mi propuesta para las tropas de tierra:
- Cada Cuerpo deja en su posición actual un tercio de su fuerza, atrincherándose. La finalidad de las unidades que se quedan es retrasar el avance enemigo todo lo posible. Se quedan para cubrir el repliegue de sus camaradas y para tratar de dar tiempo a la preparación de defensas en Tallín.
- Los dos tercios de cada Cuerpo se repliegan a la máxima velocidad, por carretera, durante hora y media, hacia sus posiciones previstas en Tallín.
- Cuando cada Cuerpo llegue a su posición prevista de despliegue en las inmediaciones de Tallín tratará de fortificarse lo mejor que pueda. Se cubren los principales accesos a la capital. En caso de que el enemigo trate de dar un rodeo podemos replegar todos o algún Cuerpo hacia la capital para defender, ahora sí, el mismísimo casco urbano.
Recordad que el enemigo es superior en número y en calidad. La finalidad de esta fase es retrasar al enemigo todo lo posible y conservar Tallín todo el tiempo que nos sea posible.
- Durante el repliegue la finalidad de nuestra aviación será doble: por un lado retrasar el avance enemigo para dar tiempo a ejecutar nuestro plan. Eso implica atacar puentes y columnas enemigas donde sea posible. Por otro lado, y hasta donde sea posible, proteger nuestras propias fuerzas en retirada frente a ataques de Stukas o cazabombarderos enemigos. Incluso aunque eso suponga dejar de defender sus propios aeródromos (no daremos a basto para todo).
Como siempre, todo lo anterior es sólo una sugerencia. Estoy abierto a otras opciones.