PA_Centauro escribió: ↑15 Ene 2022, 01:20
Por este motivo, para mi es más dificil llegar al punto exacto con un control de RPM que con un control directo del paso de hélice. Porque depende de la potencia del motor a esa RPM y tienes que saber que RPM son las que puede mover el motor para que el paso de hélice sea el más favorable para alcanzar la velocidad máxima a una determinada altura (que es otra variable por la densidad del aire en función de la altura). Puede que en un motor sean las revoluciones máximas y en otro no.
Tienes que aplicar conceptos generales que después, con experiencia, adaptarás a cada modelo para maximizar la eficacia. En un aparato como este, la norma es establecer máximas RPM para paso corto donde quieres aceleración (despegue, trepada...) o retención motor en descensos (senda de planeo, momentos puntuales en combate, picado sobre el objetivo...) y reducir RPM para paso largo (velocidad en vez de aceleración, crucero, descensos ganando velocidad...) Y luego, dentro de cada RPM establecida, jugar con la admisión para mayor o menor entrega de potencia del motor en esa posición.
A ver si esto ayuda en el planteamiento: Trasladándolo al viejo Il-2 1946, en cualquier posición de las palas (en un aparato donde controlabas directamente el ángulo de incidencia de las palas de la hélice) tenías diferentes regímenes de motor: por ejemplo, con paso corto (100%) podías llevar el motor a muy diferentes regímenes. Lo mismo en cualquier otro paso (80-70-60%)... pues ahora igual. Estableces las RPM a las que quieres que gire el motor. El sistema ajustará la hélice para tratar de mantener esas RPM. Y tú, además, podrás jugar con la presión de admisión en todo su margen posible, para buscar mayor entrega de potencia, menor consumo y temperatura, términos intermedios, etc. Pero la norma es básicamente la misma: en un coche subiendo una cuesta, no tiene sentido ir en quinta marcha por mucho que aceleres. Por autopista, no tiene sentido ir en primera por mucho que pises el acelerador.
Una comparación para el control de RPM con el símil automovilístico y su cambio de marchas sería un coche automático circulando por una autovía en el que tú le dices al sistema en qué RPM óptimas (par motor, por ejemplo, o régimen de crucero, o lo que prefieras) quieres que gire permanentemente el motor. Y el sistema va ajustando el cambio de marchas pasando de una marcha a otra sin tu intervención para mantener el motor en el régimen indicado. Si hay un repecho, tiene que bajar de marcha para que con las mismas RPM el coche tenga mayor par. Si conduces por una tramo nivelado, tú, como conductor, estableces un régimen (RPM) bajo para menor consumo de combustible, menor temperatura y desgaste. El sistema irá jugando con 4ª y 5ª marcha (automáticamente) para mantener las RPM. Si entras en un puerto y sabes que habrá ascensos y desnivel, necesitarás más aceleración que velocidad para poder alcanzar la cima, por tanto subirás las RPM para acercarlas al par máximo del motor de forma que tengas toda su potencia disponible. El sistema automático jugará con marchas más cortas en consecuencia (2ª, 3ª) para mantener las nuevas RPM marcadas y poder subir las cuestas.
Es un ejemplo que se me ocurre porque conducimos todos los días (a diferencia de pilotar) y todos entendemos cómo funciona un coche. Aunque sea un símil limitado.
