Meteorología; Cielo despejado con viento del Este, 110 grados, a 3m/s.
MISIÓN;
Despegará del aeródromo de Córdoba y se dirigirá a la población de La Roda, (ALPHA-UNIFORM 17), desde allí partirá por la carretera de Antequera (ALPHA-WHISKEY 15), para proporcionar cobertura avanzada a la Columna del General Varela, que está reuniendo hombres y material en La Roda para el asalto de la ciudad malagueña.
No se aproxime mucho a Antequera, hay información que a la entrada de dicha ciudad, hay emplazamientos antiaéreos, su misión para este sector será asegurar que no hay obstáculos hasta la llegada de la Columna Varela hasta Antequera.
Una vez reconocida la carretera, se dirigirá a la población de Castro del Río, (ALPHA-WHISKEY 22), donde localizará y atacará posiciones republicanas en esta población, esperamos atacar en este sector dentro de poco.
Una vez acaba su munición, regresará al aeródromo de Córdoba.
Con un excelente alcance de visión, casi ilimitado, aunque con mucho calor como es normal en estas tierras, puse rumbo sur alcanzando la carretera Estepa - La Roda en su punto medio, virando al este en busca de la columna Varela. Sobre la Roda, cuan distinto me parecía todo. Apenas hacia unos dias que vole la localidad pero no me parecia la misma, quizas por que la vez anterior tuve que realizar un aterrizaje de emergencia a las afueras tras visitar la estación. Esta vez, la estación no abria fuego contra mi aparato, y las tropas preparadas para salir eran nuestras. Algo más adelante, vi un control de carreteras en el cruce, el cual indicaba el rumbo a seguir hacia los rojos.
A pocos km de distancia, diviso un solitario camión en el arcen parado. No podía distinguir si era amigo o enemigo, dada la proximidad a nuestras unidades, pero algo olía raro. Según me acerque, el vehículo se puso en marcha.... viré en redondo para que vieran mis enseñas, pero no vi ninguna señal. Hice unos disparos de proximidad, para asegurarme de que me veian, pero nada....incluso parecía acelerar y contravolantear. Di por hecho que se trataba de un camión enemigo, por lo que inicie el ataque al mismo. Tras un par de pasadas, comenzó a humar del motor y seguramente alguna rueda fue alcanzada por mis disparos, pues dio un brusco giro a derechas y terminó volcando al lado de la carretera. Pude ver 3 hombres que salian tambaleándose y buscando el amparo de la vegetación y los arboles próximos.
Quizás se tratara de algun rezagado que tuviera problemas mecánicos, o simplemente alguna unidad de reconocimiento y control de la carretera, sabiendo que nuestras tropas tendrán que partir rumbo a Granada.
Continué hacia Antequera pero no había nada por la carretera, incluso sobrevolé las lomas proximas al camino desde donde pudiera haber posicionado alguna pieza de artillería o morteros que cubrieran el paso, pero todo nada. O no hay nada, o tienen una gran habilidad de camuflaje.
Al llegar a las proximidades de Antequera seguía sin contacto enemigo alguno, lo cual me parecía increible, por lo que incumpliendo las ordenes de no aproximarnos a la localidad puse rumbo a ella. Efectivamente, divisé en la curva de entrada a Antequera un control de los rojos. Allí, había parapetadas unidades de infanería, algun vehiculo ametralladora, y pronto vi a ambos lados, posiciones de ametralladora que cubría sus flancos. No fue dificil pues rapidamente abrieron fuego contra mí.
Se me presentó el dilema de si dejar esas ametralladoras a las unidades de tierra o seguir con el plan establecido. Finalmente decidí que lo más importante era llegar a base y avisar de lo visto a la columna Varela antes de que llegaran a esa posición, y que la munición bien pudiera ser necesaria en el plan de vuelo fijado. Así pues, puse rumbo a Castro del Río, no sin antes asegurarme de que el aeródromo de Antequera seguía vacío de aviones enemigos.
Navegue sobre la carretera por si algun suministro podia interceptar, pero no hubo exito. Lucena y cuanta localidad sobrevolaba era reconocida, pues suelen ser estupendos sitios de parada y fonda, de suministro y descanso para las columnas y tropas, pero nada, nada fuera de lo normal había en ellas.
En poco tiempo llegue a Castro del Río, otra localidad que viste hace algunos días, y nuevamente ataque las posiciones ya conocidas al oeste de la misma. Tras varias pasadas, 3 camiones que parecían de tropas y material, y 2 de combustibles fueron alcanzados e inutilizados. También fue silenciada una ametralladora que me daba la bienvenida cada vez que hacía una pasada. Y finalmente gaste la munición ametrallando las trincheras de los rojos.
