
Pronto Freya nos alerta de enemigos dirigiéndose a OTTO (Köln) así que ponemos rumbo hacia allí.

Por desgracia, los bombarderos han alcanzado ya parte de la ciudad que arde en llamas. Los reflectores y la flak marcan a los enemigos.



Empieza un confuso combate...











Ya casi sin munición me alcanzan...

Y Junge está a punto de derribarme...

Sin apenas visibilidad con el cristal lleno de aceite, logro aterrizar...

