Tras el ataque al aeródromo de Velu, la base del Jasta2 se traslada unos 9 km al Norte, a Lagnicourt. El trabajo realizado por Boelcke va dando sus frutos. Los aparatos germanos siguen siendo inferiores en número a los británicos y franceses, pero no en maniobrabilidad y capacidad de trepada. Las tácticas de grupo funcionan. Van sobresaliendo pilotos como Von Richthofen, Erwin Böhme y el propio Boelcke, que ha aumentado su record de derribos confirmados a 40.
28 de Octubre, cinco de la tarde, nubes bajas, viento fuerte, lluvias ocasionales. Tras nada menos que cinco salidas durante el día, Boelcke es requerido para una sexta. Una llamada urgente requiere el apoyo del Jasta2 a un ataque de infantería. Su respuesta fue inmediata “todo listo?”. Unos minutos más tarde, el mayor héroe de la avión en ese momento, fallecía al sufrir una colisión de escasa entidad con su compañero Böhme. Éste pudo controlar el avión, no así Boelcke, que cayó irremediablemente (no se a que me recuerda esto

Se propone una misión como homenaje, ambientada en ese día. Como apoyo a la infantería, se propone un ataque a los aeródromos de St. Eloy y La Targette, intentado como primer objetivo que la aviación aliada no suponga un contratiempo para nuestros soldados, y como segundo objetivo, procurar la destrucción del mayor número de unidades terrestres o aviones en tierra No se dispone por el momento de ningún bombardero, así que se atacará exclusivamente con “peladillas”. Se volará si no hay contratiempo el próximo Miércoles 2 a las 10:30; se volverá a lanzar 5 minutos más tarde


Vayan apuntándose
